El museo al aire libre más grande de Barcelona (La Vanguardia)

Paseos con historia
Pasear por el cementerio de Montjuïc permite identificar joyas inesperadas del patrimonio funerario y representa un recorrido imprescindible para entender la historia de la ciudad
Guillem Cerdà
Barcelona
10/10/2025 06:00

La mejor manera de recorrer el cementerio de Montjuïc es conduciendo. Es sábado y apenas entran algunos coches de probables familiares. El silencio general solo es interrumpido por los ecos del puerto y los pitidos de mercancías y cruceros que asoman justo enfrente, en una panorámica abierta al mar. Hace unos años, las gaviotas se adueñaron de algunas zonas del recinto y llegaron a provocar serios percances, hasta el punto de que Cementerios de Barcelona recomendó a los visitantes acudir con paraguas para protegerse de la actitud agresiva de los animales; si bien esta mañana, Salvat-Papasseit lo dice, “volen tan altes, les gavines del port, que planegen només”. Basta con detenerse unas cinco o seis veces para completar la visita con calma, y en cada parada se puede hacer una breve excursión entre los caminos y sepulturas.

Al poco de ascender aparece la tumba del político y escritor Enric Prat de la Riba, bajo la sombra de un ciprés. Durante el franquismo llegó a circular la duda de si sus restos seguían allí, aunque nunca se aclaró del todo. El sobrio homenaje es puro noucentisme: una cruz de Sant Jordi preside el espacio, flanqueada por cuatro bancos que representan las provincias catalanas. En su entierro se utilizó la célebre carroza fúnebre de caballos conocida como Carrossa Estufa, la misma que acompañó a Josep Llimona o Santiago Rusiñol. Solo un peldaño más arriba, casi aislada del resto, el visitante identificará el panteón del tenor Francesc Viñas, referencia del wagnerismo catalán. Su tumba luce una escultura monumental con Lohengrin, Christian y Parsifal, con este último alzando el Grial, símbolo del mito que Wagner devolvió a la modernidad y que Viñas ayudó a arraigar en Catalunya.

Subiendo entre curvas y terrazas, lo que aparece con más insistencia son miles de sepulturas discretas, repetidas, anónimas, que se multiplican por todo el cementerio; inscripciones a veces mínimas, como un “Pau eterna”, “Bon repòs”; o una que lleva “Conchi”, secamente. Más allá de las rutas literarias, artísticas o históricas que hoy pueden seguirse con un código QR, lo que realmente marca el recorrido es lo inesperado, hallazgos como la tumba de Francesca Bonnemaison en la vía Santa Eulàlia, la capilla de la familia Goytisolo o excentricidades maravillosas, como la de un catedrático de Anatomía, Jaume Farreras Framis, quien, a modo de lección eterna, mandó representarse con el cráneo al descubierto.

De hecho, el espacio es tan grande que el cementerio en cierto modo funciona como una ciudad en sí misma, con barrios y zonas nobles, donde la burguesía catalana llegó a competir a finales del siglo XIX y principios del XX por asegurarse el mejor lugar; esa “batalla” dio mucho juego a escultores y arquitectos —Albareda, Puig i Cadafalch, Domènech i Montaner, Sagnier, entre otros— y es la explicación de que hoy el visitante encuentre capillas familiares o puertas de mausoleos que nada tienen que envidiar a algunas fachadas del paseo de Gràcia.

El cementerio también se asemeja con la ciudad en el hecho de que el recinto crea curiosas vecindades. Aquí, por ejemplo, reposan a muy pocos metros Àngel Guimerà y Joan Vinyoli
—dos autores que seguramente no coincidirían en una antología—, unidos en la discreción de dos sepulturas modestas. Muy cerca, una sepultura de la familia Junoy —¿serían parientes del poeta vanguardista Josep Maria Junoy?— recuerda que la trama no es casual.

La ruta femenina, aún poco transitada, sigue a pioneras como Teresa Claramunt i Creus o Dolors Monserdà i Vidal
Una parada imprescindible de cualquier cementerio siempre son las tumbas gitanas, una comunidad para la cual la muerte no es un asunto menor. Los rituales gitanos combinan expresiones del cristianismo con costumbres propias: el luto, que puede durar tanto como un año para los allegados más cercanos, y donde vestir de negro, limitar celebraciones y evitar la música se convierte en señal de duelo. Los gitanos cuidan mucho de estos espacios: recién colocadas, las flores —rosas de colores, claveles, ramos simples— lo delatan. Entre todas esas tumbas destaca particularmente la de Antonio Jodorovich Estancovich, frente a una gran capilla familiar. Una escultura realista le representa de tamaño casi humano: la ropa, los rasgos y hasta un paquete de tabaco le sale del bolsillo, un detalle que lo humaniza y rompe en cierto modo la solemnidad del lugar.

Vale la pena seguir la ruta femenina, aún poco transitada. Aquí reposan pioneras como Teresa Claramunt i Creus (1862-1931), obrera textil y activista que se convirtió en referente del anarcosindicalismo y del feminismo en Catalunya, incansable defensora de los derechos de las trabajadoras. Muy cerca está el panteón de Dolors Monserdà i Vidal (1845-1919), escritora y dramaturga, primera mujer en presidir los Jocs Florals, símbolo de la incorporación femenina al mundo literario y cultural catalán. También la huella íntima de las mujeres ligadas a Joan Miró —su madre, su esposa y su hija— aparece en el mausoleo familiar conocido como Arc-Cova. Y en el Fossar de la Pedrera, espacio de homenaje a las víctimas de la represión franquista, la presencia de mujeres anónimas recuerda que la historia no solo se escribe con nombres propios.

El homenaje a Lluís Companys ocupa aquí también un lugar especial: en el mismo Fossar hay una tumba común donde reposan los restos del presidente ejecutado en 1940. Este espacio es desde hace muchos años monumento de memoria institucional: cada 15 de octubre se celebra un acto público en su honor y en el de todas las víctimas de la represión.

Siguiendo una ruta en clave política, una parada esencial también ha de ser la tumba de Francesc Macià, presidente de la Generalitat, fallecido en la Navidad de 1933. Su panteón, situado en la Agrupación Cuarta del sector Sant Josep de Montjuïc, recibe cada año ofrendas y ceremonias institucionales. Curiosamente, muy cerca también descansa Florenci Pujol i Brugat, padre de Jordi Pujol Soley, en el mismo sitio donde enterraron el pasado julio a Marta Ferrusola, la que fue su yerna, y donde —presumiblemente— se enterrará al 126.º presidente de la Generalitat.

Quizás uno de los sitios de memoria histórica más espectaculares del lugar es el Panteón de los Franceses, dedicado a los soldados galos y voluntarios españoles muertos “por el triunfo de la justicia y la libertad” durante la Primera Guerra Mundial. Desde distintos ángulos se percibe su magnitud y los nombres esculpidos en una gran piedra, con una forma de estela vertical. Todo el conjunto tiene un aire de conmemoración heroica, sobria pero cargada de simbolismo republicano y memorialista, muy característico de los monumentos de posguerra dedicados a la fraternidad entre España y Francia.

El Panteón de los Franceses, en honor a los soldados galos que cayeron en la Primera Guerra Mundial

Nacho Vera/Propias
El entierro de Verdaguer fue la mayor manifestación de duelo que se había producido nunca en Catalunya. Su tumba, más de cien años después, sigue siendo uno de los reclamos más populares del cementerio. Situada en la parte alta, el homenaje se integra en el entorno natural, aprovechando una gran roca rojiza que actúa como fondo y soporte del conjunto. A ambos lados, los cipreses y el muro de nichos refuerzan la sensación de verticalidad y silencio, con esa austeridad casi monástica.

Otra joya imprescindible —tantas que resulta imposible abarcar todas en una sola visita— es la tumba de Ildefons Cerdà, el ingeniero que ideó el Eixample y que murió en 1876, en un balneario de Cantabria. Solo, divorciado y completamente olvidado. La prensa apenas publicó breves notas y el semanario La Campana de Gràcia señaló que el urbanista había fallecido “poco menos que pobre”. Barcelona, aún dividida por las polémicas de su plan del Eixample, no estaba preparada para reconocer su legado.

La tumba de Ildefons Cerdà, el ingeniero que ideó el Eixample y que murió en 1876

Casi un siglo más tarde, en 1971, el Ayuntamiento trasladó sus restos a Montjuïc, en una iniciativa impulsada por el Col·legi d’Arquitectes, justo cuando se reeditaba su tratado de urbanización. La preciosa escultura que hay encima de su tumba, bastante desconocida y de autor igualmente desconocido —si bien se ha atribuido erróneamente a Subirachs—, reproduce un fragmento de su plano de 1859, con las manzanas proporcionales a su trazado original. Cerdà, que precisamente proyectó sin éxito la urbanización de Montjuïc, ha acabado descansando en la misma montaña que quiso ordenar. Un destino, al menos, perfectamente planificado.


Grupo Albia pone en marcha su nuevo tanatorio-crematorio en Donostia (El Confidencial)

Con instalaciones avanzadas y servicios personalizados, el nuevo centro de Grupo Albia en Donostia apuesta por la innovación, el respeto ambiental y el acompañamiento emocional en las despedidas familiares

Por El Confidencial
13/10/2025 – 19:32

Grupo Albia anunció que su nuevo tanatorio Crematorio Rekalde Berri ya está operativo y al servicio de las familias de Donostia. Según explicó, se trata de un nuevo espacio concebido para dar respuesta a las necesidades actuales desde una propuesta «innovadora, respetuosa y cercana».

«Nuestro objetivo es ofrecer un entorno acogedor, flexible y tecnológicamente preparado para que cada familia pueda despedirse como desee, con libertad y dignidad. Además, la apertura de Rekalde Berri consolida nuestra presencia en las tres capitales de País Vasco, alcanzando los 10 centros funerarios en la región», destacó Daniel Palacios, director general de Grupo Albia.

Ubicado en la Avenida Errekalde 55, el nuevo tanatorio-crematorio se presenta como una de las instalaciones más avanzadas del sector en la región. Rekalde Berri ha sido concebido desde el inicio como un espacio abierto a todo tipo de despedidas, con una gran sala de ceremonias que permite acoger cómodamente a más de 60 asistentes, una característica única en Gipuzkoa.

Cuenta con la primera sala inmersiva instalada en un tanatorio de País Vasco, «que permite vivir despedidas profundamente personalizadas gracias a la proyección de imágenes, vídeos y sonidos diseñados para rendir homenaje a la vida del ser querido. Este entorno, junto a un crematorio de última generación equipado con sistema propio de filtrado de emisiones, permite una despedida innovadora y, al mismo tiempo, respetuosa con el entorno natural», indicó Grupo Albia.

Dispone de cuatro salas de velación, una de ellas convertible en sala VIP, cafetería con terraza, catering exclusivo con menús personalizados, aparcamiento y zona habilitada para bicicletas. El centro también cuenta con salas de tanatopraxia adaptadas a ritos religiosos como el musulmán y áreas de atención emocional, así como sistemas de domótica.

«Este nuevo centro nace con la vocación de transformar la forma en que las familias se despiden de sus seres queridos. Hemos cuidado cada detalle para ofrecer una experiencia acogedora, cercana y totalmente adaptada a las distintas sensibilidades, culturas y formas de entender la despedida», apunta Beatriz Alda, gerente de Grupo Albia en Gipuzkoa.

Por otro lado, el centro utiliza gas natural en su horno crematorio, incorpora un sistema de filtrado de partículas que reduce de forma significativa las emisiones y dispone de cargadores para vehículos eléctricos. Además, Grupo Albia ha impulsado en la región el uso de urnas biodegradables, el uso de vehículos 100 % eléctricos y la colaboración con proveedores locales.

«Uno de los rasgos más valorados de Grupo Albia es la atención emocional que ofrece a las familias. A través de su Unidad de Atención al Duelo (UAD), la compañía brinda apoyo psicológico profesional y personalizado durante todo un año a quienes lo necesiten, incluyendo casos de duelo complejo como el infantil o el vinculado a situaciones especialmente traumáticas. Rekalde Berri representa el modelo de tanatorio-crematorio que marca el futuro del sector: un espacio moderno, tecnológico, emocionalmente cuidado y comprometido con su entorno, que pone a las personas en el centro de todo el proceso», concluyó.


Nuevo paso adelante para el crematorio de Tomelloso (La Voz de Tomelloso)

El Ayuntamiento dará luz verde definitiva a una infraestructura largamente reclamada que estará junto al Cementerio Municipal y comenzará a construirse antes de que termine el año
La Voz | Lunes, 13 de Octubre del 2025

Tomelloso está más cerca de contar con su propio crematorio. Según ha informado el Ayuntamiento en un comunicado de prensa, la Junta de Gobierno Local aprobará este miércoles la licencia de obras para la construcción de esta nueva infraestructura. Con este trámite se completa el proceso administrativo y se despeja el camino para que los trabajos puedan iniciarse antes de que finalice 2025.

Las instalaciones se ubicarán en los terrenos municipales ya cedidos a la empresa adjudicataria, Servicios Funerarios y Tanatorio Virgen de las Viñas S.L., junto al recinto del Cementerio Municipal.

Sin coste para la ciudadanía

Una de las claves del proyecto es que no supondrá gasto alguno para los vecinos. La construcción se realizará mediante un derecho de superficie de 30 años, aprobado por unanimidad del Pleno y formalizado por el alcalde, Javier Navarro, y el representante de la empresa, David García Casillas.

El plazo estimado de ejecución es de un año, por lo que el servicio podría estar operativo a lo largo de 2026.

Compromiso cumplido

El alcalde ha celebrado este avance como una muestra del trabajo continuado del equipo de gobierno: “Con la aprobación de la licencia se cumple otro compromiso del Ayuntamiento, avanzando en dotar a Tomelloso de un servicio muy demandado”. Además, ha destacado la “seriedad y el rigor” con los que se ha actuado durante todo el procedimiento, así como la “transparencia y la seguridad jurídica” garantizadas desde el inicio.

Servicio moderno y cercano

La puesta en marcha del crematorio permitirá completar los servicios funerarios de la ciudad, evitando desplazamientos a otras localidades y ofreciendo a las familias una alternativa más cómoda, moderna y respetuosa con el entorno.


Reforma integral del tanatorio municipal de Tarragona con un presupuesto de 3,2 millones (Diari de Tarragona)

El proyecto, que ya ha comenzado, modernizará las instalaciones y mejorará la atención a las familias y al personal

La reforma contempla la parte exterior e interior de este equipamiento.
Diari de Tarragona
14.10.2025 | 09:34

Actualizado:14.10.2025 | 09:34

Las obras de la fase 1 del proyecto de reforma integral del tanatorio municipal de Tarragona ya han comenzado. Con esta actuación, la Empresa Mixta de Serveis Fúnebres Municipals de Tarragona SA (EMSERFUMT) busca modernizar las instalaciones, optimizar los espacios y ofrecer un mejor servicio tanto a las familias como al personal. Está previsto que esta primera fase finalice en julio de 2026.

El proyecto global consta de tres fases y supondrá una inversión total de 3,2 millones de euros. La primera, iniciada este martes, cuenta con un presupuesto de 1.001.037 euros y ha sido adjudicada a la empresa Garcia Riera S.L. Las obras se desarrollan en un edificio de 3.200 metros cuadrados distribuidos en tres plantas, y constituyen el primer paso de una actuación que transformará por completo el equipamiento funerario.

Principales actuaciones de la fase 1

Durante esta primera etapa se ejecutarán trabajos de rehabilitación y mejora tanto en las zonas de atención al público como en los espacios logísticos y técnicos. Entre las principales intervenciones destacan:

Sala de Atención a Familias, situada en el vestíbulo, para ofrecer un espacio más acogedor y privado a las personas usuarias.
Reorganización de la recepción y la administración, sustituyendo el despacho actual por un segundo punto de atención al público.
Nuevos aseos públicos, incluyendo uno adaptado para personas con movilidad reducida.
Colocación de un zócalo protector en la Sala de Actos para mejorar la durabilidad de los materiales.
Transformación del patio central de la planta baja en un espacio ajardinado de estancia con plataforma de madera y bancos.

La reforma del tanatorio se llevará a cabo en tres fases, que contempla la parte exterior e interior del equipamiento.Ajuntament de Tarragona
En la zona logística, las principales intervenciones serán:

Reforma del garaje, con una segunda puerta para vehículos y una nueva salida peatonal directa al exterior.
Delimitación y protección del área de garaje, mediante cerramientos EI y vestíbulos de independencia, además de la adecuación de rampas y escaleras.
Reconfiguración del almacén, incorporando medidas de seguridad complementarias, ignifugación y almacenamiento vertical; desmontaje de los antiguos altillos y creación de una nueva salida peatonal.
Cierre del hueco del montacargas en la primera planta para mejorar la seguridad estructural.
Eficiencia energética y actualización de instalaciones

Una de las mejoras destacadas de esta fase es la instalación de una planta fotovoltaica para autoconsumo, con una inversión de 116.061,28 euros, que permitirá reducir el consumo energético y el impacto ambiental del edificio.

Asimismo, se elaborará un Plan Director de Instalaciones y varios proyectos técnicos específicos (baja tensión, climatización, ventilación, etc.) para actualizar toda la infraestructura del centro.

Las siguientes fases

La segunda fase podrá solaparse parcialmente con el tramo final de la primera e incluye la construcción de un nuevo edificio anexo que albergará el nuevo crematorio y una sala para ceremonias más íntimas. Actualmente se realizan unas cinco incineraciones diarias, y con el nuevo horno se podrá llegar hasta diez.

Por su parte, la tercera fase se centrará en la transformación de la antigua cafetería —en desuso desde 2020 tras finalizar la concesión— en un restaurante, con el objetivo de mejorar el servicio a los usuarios, además de la renovación de las siete salas de velatorio.

“Esta reforma integral representa un paso adelante en la modernización de los servicios funerarios municipales, con una clara apuesta por la calidad, la sostenibilidad y la mejora de las condiciones laborales del personal”, ha destacado Ivana Martínez, presidenta de la Empresa Mixta de Serveis Funeraris.

“Queremos que el tanatorio sea un espacio digno, confortable y eficiente, que responda a las necesidades actuales y futuras de la ciudadanía de Tarragona”, ha añadido.


La oleada de vandalismo en el Cementerio de Torrero ha afectado a 488 nichos (Cadena SER)

La Policía investiga los daños causados en cerca de 500 lápidas y nichos, mientras el Ayuntamiento refuerza la seguridad y ha elaborado un listado público para la información de los afectados

Redacción
Radio Zaragoza 14/10/2025 – 16:45 UTC

Zaragoza

El Cementerio de Torrero ha sido escenario en los últimos días de una serie de actos vandálicos que han dañado cerca de 500 ornamentos y elementos decorativos de lápidas y nichos. Una de las tumbas afectadas ha sido la del poeta Miguel Labordeta, que ha sufrido el robo del retrato de bronce.

El Ayuntamiento ha inspeccionado el cementerio y concluye que finalmente son 488 los nichos afectados. Por ello ha elaborado un listado que puede consultarse en su página web. Las áreas más afectadas son las manzanas 109, 111, 113 y 114.

El consistorio ha condenado con firmeza estos hechos, que han generado una profunda indignación entre los vecinos, especialmente entre quienes han visto afectados los espacios de descanso de sus seres queridos.

La situación fue detectada por las Brigadas Municipales del Cementerio, que han trasladado toda la información a la Policía Local y Nacional. La vigilancia en el recinto se ha reforzado y ya hay una investigación abierta para esclarecer lo ocurrido.

Desde el Ayuntamiento se anima a los propietarios afectados a presentar denuncia ante la Policía Nacional. Para facilitar este trámite, en los próximos días se publicará en la web municipal un listado actualizado con los espacios dañados, elaborado por las Brigadas Municipales. Esta información también estará disponible a través del teléfono municipal 010.

Además, el área de Urbanismo está estudiando medidas para reforzar el perímetro del cementerio y evitar accesos no autorizados. “Más allá del daño material, estos actos suponen una falta de respeto inadmisible hacia la memoria de quienes descansan en el cementerio y hacia sus familias”, han señalado desde el equipo de Gobierno.

El Cementerio de Torrero, en funcionamiento desde hace 191 años, es el mayor recinto funerario de Aragón. Ocupa más de 519.000 m² —unas 22 veces la superficie de la Plaza del Pilar— y acoge los restos de cerca de 700.000 personas. Cuenta con 115.000 nichos, 9.027 columbarios, 147 panteones, 1.084 capillas y 19.408 sepulturas, además de 5,7 hectáreas de zonas verdes.


Confirmado por el Ayuntamiento: esta empresa gestionará el cementerio de Zaragoza por 6,5 millones (El Español)

La última reunión de la mesa de contratación ha confirmado que toda la documentación presentada por la compañía cumple los requisitos.
Más información: Zaragoza ingresará 3,5 millones de euros más por la adjudicación de los servicios del cementerio de Torrero
Judit Macarro
Zaragoza
Publicada15 octubre 202507:00h

Es oficial. La empresa Mémora gestionará el cementerio de Torrero en Zaragoza y lo hará con una inversión de 6,5 millones de euros. La última reunión de la mesa de contratación ha confirmado que toda la documentación presentada por la compañía cumple los requisitos y podrá ponerse al frente del camposanto.
Así, tal y como ya se anunció el pasado mes de septiembre, será esta empresa la que gestionará el cementerio durante los próximos 30 años (una vez se traspase la concesión). Lo hará con una oferta alza del canon anticipado del 116,67%, es decir, por 3,5 millones más de lo que se tenía previsto en la licitación inicial.

Y no solo eso, la empresa ganadora del concurso también ha planteado una subida del 8% del canon periódico anual. Eso supone, en total, que el Ayuntamiento ingresará un 10% del importe neto de aquellas actividades que Mémora desempeñe al frente del cementerio.

Un nuevo edificio

Además, la compañía deberá hacer una inversión de 7,7 millones de euros para llevar a cabo una serie de mejoras en las instalaciones en los primeros 4 años de concesión. Entre ellas, la construcción de un nuevo edificio de 1.800 metros cuadrados junto a las actuales instalaciones, en concreto al lado del Tanatorio B, las capillas 1 y 2, y la zona donde ya se ubican los hornos crematorios.

Para ello se utilizará parte del vial existente que conduce a los aparcamientos, sin interferir en el espacio donde actualmente se encuentran unos 75 columbarios. Además de los cuatro nuevos hornos crematorios, una sala específica para despedidas y cuatro salas de velatorio adicionales, también se construirá un nuevo acceso alternativo al aparcamiento para sustituir el vial actual que será ocupado por la ampliación.

Esta actuación permitirá aumentar notablemente la capacidad de cremación del cementerio, pasando de las 16 incineraciones cada 12 horas a un máximo de 24. Además, los nuevos sistemas contarán con tecnología de filtrado más moderna, pensando en una proyección de servicio de hasta 40 años y conforme a la normativa vigente.

Zaragoza actualiza los servicios del cementerio de Torrero que ampliará sus instalaciones con una inversión de 7,7 millones
La empresa tiene un plazo máximo de seis meses (desde la firma del acta de inicio de la concesión) para presentar tanto el proyecto básico como el de ejecución del nuevo vial y del edificio de crematorios.

Mémora, la mejor de las tres ofertas presentadas al concurso, era una de las empresas que conformaba la UTE Serfutosa, la concesionaria durante los últimos 30 años. El contrato de la concesión venció ya en 2021 y, con una pandemia de por medio, se ha venido prorrogando desde entonces la gestión del camposanto que ahora regentará la compañía hasta el 2056.

Un tiempo en el que tendrá varias tareas y así lo ha impuesto el Consistorio. Además del nuevo edificio, Mémora tiene que priorizar la satisfacción del ciudadano, el acompañamiento para paliar el sufrimiento de los familiares y allegados -vinculados a la prestación del servicio- y la sostenibilidad financiera y ambiental del complejo. Asimismo, se deberá encargar de las tareas relacionadas con el tanatorio, dado que el resto del equipamiento es gestionado por el personal municipal.

En concreto, se trata de los oficios religiosos; el velatorio; la cremación; la gestión de las cámaras frigoríficas de conservación y de congelación o la programación de los servicios y el desarrollo comercial atendiendo a las empresas funerarias. Además, la adjudicataria también prestará otros servicios complementarios derivados de la explotación, conservación y mantenimiento. Por ejemplo, en la adjudicación del concurso se recoge que el concesionario deberá continuar el servicio de cafetería.


Funermostra rompe tabúes: la feria que transforma la despedida final en una experiencia personalizada, sostenible y con inteligencia artificial (Cope)

“Queremos crear espacios más amables, donde el recuerdo se transforme en algo que genere vida”
La principal feria del sector funerario en España reivindica la importancia de adaptarse a los cambios sociales con innovación tecnológica

Borja Rodríguez

Valencia – Publicado el 16 oct 2025, 14:10

2 min lectura

Funermostra, la feria de referencia del sector funerario en España, ha cerrado su última edición con un éxito rotundo de participación y una apuesta clara por la innovación, la sostenibilidad y la personalización en los servicios funerarios. A pesar de tratarse de un sector que, como reconocen sus propios organizadores en Mediodía COPE Más Valencia, «clientes nunca le van a faltar», cada vez son más evidentes los cambios sociales que exigen una adaptación continua.

“La feria ha cubierto todas nuestras expectativas, estamos muy satisfechos con la respuesta del sector”, afirma José Vicente Aparicio, presidente de Funermostra. Esta cita, que se celebra cada dos años en Feria Valencia, está dirigida a profesionales y permite conocer las nuevas tendencias, productos y servicios que están marcando el presente y futuro del sector funerario.

Uno de los focos principales de esta edición ha sido el uso de la inteligencia artificial. Desde la gestión empresarial hasta el mantenimiento del recuerdo de los fallecidos, las posibilidades que ofrece esta tecnología han generado tanto expectación como debate. “Estamos explorando cómo la IA puede ayudar a mantener vivo el recuerdo de una persona mediante avatares que permiten mantener conversaciones con sus seres queridos”, explica Aparicio. Sin embargo, advierte de la necesidad de abordar esta innovación con cautela y sensibilidad: “Esto hay que cogerlo con pinzas; tiene que analizarse bien desde el punto de vista del duelo y el perfil de quien lo utiliza”.

Además de la digitalización, la sostenibilidad ha sido otro de los ejes vertebradores de la feria. Urnas biodegradables diseñadas para disolverse en agua o integrarse con humus en tierra, ataúdes con maderas certificadas y espacios naturales que permiten convertir las cenizas en vida, formando parte de árboles familiares, son algunas de las propuestas que han captado la atención de los visitantes.

“Queremos crear espacios más amables, donde el recuerdo se transforme en algo que genere vida”, destaca el presidente de Funermostra. La feria no solo se preocupa por los productos, sino también por los espacios y su simbología, apostando por una naturalización del entorno funerario.

En un contexto en el que cada vez más personas deciden planificar su despedida con antelación, la feria responde también a la necesidad de conocer qué servicios están disponibles. Desde ceremonias laicas hasta rituales personalizados, pasando por propuestas que integran música, arte o incluso tecnología audiovisual, el abanico es cada vez más amplio y se adapta a todas las sensibilidades.

“La muerte es un momento triste, sí, pero también es un acto profundamente humano. Por eso trabajamos para que cada despedida esté en sintonía con los deseos y valores de cada persona”, concluye Aparicio.


La investigadora que más sabe sobre la IA de la inmortalidad digital: «Puede llegar a ser adictiva» (El Confidencial)

Katarzyna Basinska, investigadora en Cambridge, atiende a El Confidencial antes de una conferencia en Valencia y advierte de los riesgos éticos y sociales de la industria de los bots de personas fallecidas

Katarzyna Basinska, en Valencia, en su charla con El Confidencial. (Funermostra/Alberto Saiz)
Por Víctor Romero. Valencia
14/10/2025 – 19:45

Un campo sembrado de ataúdes de distintas formas y colores es lo primero que salta a la vista cuando se accede al expositor de Funermostra. Entre zumos, canapés y charlas profesionales, ajenos al recelo con el que el conjunto de la sociedad suele observar esta actividad económica, producto, evidentemente, del pánico a la muerte y a la pérdida de seres queridos, decenas de comerciales, empresarios, agentes o fabricantes se dan cita un año más en uno de los pabellones de Feria Valencia. Es un negocio que movió el año pasado casi 1.700 millones de euros, según la Asociación Nacional de Servicios Funerarios-Panasef. En esta vida no hay nada seguro, salvo la muerte y los impuestos, dice la frase que se atribuye a Benjamin Franklin.
Sin embargo, esta edición, la novedad en este certamen sectorial no han sido los nuevos tipos de furgones funerarios de Bergadana, los féretros premium de Divina Aurora o los crematorios de última generación. El evento con mayor expectación (llenó la sala de charlas) llegó con una conferencia impartida por una investigadora de Cambridge que lleva tiempo estudiando, desde una perspectiva académica, la irrupción de la inteligencia artificial (IA) en el negocio de la muerte, especialmente en lo relativo a la aparición incipiente en China, Corea o Estados Unidos de compañías especializadas en la generación de bots o avatares a partir de datos de personas fallecidas. La inmortalidad digital.

Pasear por Funermostra es imaginarse a los agentes de seguros de decesos ofreciendo en sus pólizas uno de estos bots para hablar y chatear con el ser querido tras su desaparición y prometiendo el acceso a esa eternidad virtual. Pero Katarzyna Nowaczyk-Basińska, nacida en Polonia hace 36 años, cree que enfocar este desarrollo tecnológico en clave puramente comercial es un error.

Investigadora asociada del Centro Leverhulme para el Futuro de la Inteligencia en la prestigiosa universidad de Reino Unido, ha enfocado su carrera académica hacia el estudio de la inmortalidad digital y la exploración sobre «cómo las tecnologías digitales modelan y remodelan nuestra comprensión de la muerte, la pérdida, el duelo y la presencia en el más allá», según su propia biografía. Su discurso es que no todo es tan bonito como se pinta ni tiene por qué aportar consuelo a la angustia de esa pérdida.

PREGUNTA. Ha estudiado el tema de los productos que buscan la inmortalidad digital, especialmente en Estados Unidos o China. ¿Cree que hay un mercado para esto?

RESPUESTA. Noto muchísimo interés en mi investigación y en el tema en concreto. Este sector era totalmente de nicho y, de hecho, cuando hablabas de inmortalidad digital se te consideraba una persona rara porque era un tema muy poco común. Pero en 2010 se produjo un gran cambio. Pasamos de prometer esta inmortalidad digital, algo que iba a ser una promesa de futuro, a poder realmente ofrecerla. Desde entonces se han creado muchas empresas. El mayor mercado está ahora mismo en Estados Unidos y en China. Pero hay empresas de todo el mundo que están ya trabajando en este tipo de servicios: en Italia, en Polonia, en Rusia, por dar algunos ejemplos. Y es un mercado que está en crecimiento.

P. Hay culturas en las que cuando alguien se muere dejan de nombrarle. Hay otras, como la occidental, en las que incluso algunos cementerios son centros turísticos. ¿Vamos a ver panteones con hologramas y voces reales de ultratumba?

R. Ya está sucediendo. Hay lugares y cementerios que han implementado este tipo de tecnologías. Puedes usar tu teléfono para escanear un código QR y ver a esa persona y la historia que esta persona está contando sobre su vida. Pero también en esta pregunta tocas algo muy importante sobre no ser mencionado después de la muerte. Es algo que intento implementar en mi investigación. Hablar sobre el derecho al olvido. En toda esta industria, y con esta enorme presión de vivir, de preservar tus recuerdos, de preservar tus historias, de ser un avatar post-mortem digital, creo que debería haber espacio para ser olvidado. Debemos tener el derecho, igualmente respetado, de ser olvidados. Tenemos que buscar estrategias, tanto para el que quiere ser recordado como para el que quiere ser olvidado y ser más creativos e imaginativos en este campo. Tal vez solo quiero morir, y morir también en el mundo digital.

P. Desde una perspectiva cultural, ¿pueden clasificarse las sociedades entre aquellas que son más proclives a generar este tipo de instrumentos y otras que prefieran el derecho al olvido, o a ir pasando página generación tras generación?

R. Sí, efectivamente es muy importante tener en cuenta las diferencias culturales en cómo tratamos esta inmortalidad digital. He trabajado en un proyecto que se llama Imaginaries of Immortality in the Age of AI y en este proyecto hemos trabajado en Polonia, India y China. Lo primero que veíamos era que las personas se daban cuenta del profundo impacto que podían tener estas tecnologías en cómo entienden la muerte, en cómo procesan la muerte. También había una especie de miedo entre los participantes de este proyecto por las consecuencias que pueden tener estas tecnologías, por ejemplo, en su bienestar. En el proyecto participaron tanto expertos como no expertos en este campo y lo que se concluyó era que estas tecnologías podían ser muy adictivas, porque se genera una vinculación con la persona fallecida que luego es muy difícil de dejar. Esto generaba también cierta preocupación.

P. ¿Adictivas?

R. Los expertos dijeron que esto podría tener consecuencias muy profundas para la sociedad y tal vez deberíamos reconsiderar el uso de esta tecnología, reconstruir de alguna manera este ecosistema y que el mercado no esté únicamente dominado por empresas comerciales. Introducir nuevas figuras como artistas, académicos, profesionales de la salud y los cuidados paliativos. Introducir valores diferentes en un mercado que en estos momentos está dirigido a las ganancias. La muerte es algo tan profundo y tan personal que necesitamos encontrar una forma de abordarlo con más empatía y no solamente pensando en el beneficio comercial, en el beneficio empresarial.

P. He leído en alguna entrevista suya que la irrupción de la tecnología en la experiencia de la muerte o en la despedida, podía hacer que la despedida no fuera definitiva que fuera más bien como un hasta luego. ¿Qué riesgo hay ya desde un punto de vista psicológico de vivir un duelo infinito? Un no pasar página en la marcha de los seres queridos desde el punto de vista psicológico.

R. Psicólogos y psiquiatras que trabajan en este campo están muy preocupados por las implicaciones de estas tecnologías en nuestro bienestar y el proceso de despedida. Ahora mismo, no hay una investigación que muestre los impactos de esta tecnología ni a corto ni a largo plazo porque es muy nueva, no ha habido tiempo. Tenemos que ser pacientes, pero al mismo tiempo tenemos que ser muy conscientes del hecho de que estas tecnologías pueden ser potencialmente dañinas. Por eso algunos especialistas recomiendan pensar en estos bots de despedida o death bots como dispositivos médicos, algo que debería ser utilizado bajo supervisión de especialistas en un entorno muy particular con un tiempo limitado para evitar diferentes patologías.

P. Hablamos de riesgos. ¿Pero estos bots también podrían ayudar a gestionar esas despedidas para que sean más suaves, por ejemplo en el caso de muertes traumáticas o de muertes súbitas de personas queridas que pueden ser difíciles de superar?

R. Es verdad que hay usuarios cuya motivación al utilizar estas tecnologías ha sido la de dar un cierre a este proceso. Por ejemplo, si has perdido a tu novio en un accidente de tráfico y no te has podido despedir serviría para poder despedirte y cerrar ese capítulo. Tiene esta parte positiva, ese uso positivo. Pero también es muy personal, muy individual. Yo sería muy cauta a la hora de recomendar esa tecnología. En Polonia hicimos unos focus groups que llamamos Hablar de la inmortalidad mientras cenamos. Se hablaba del tema de la muerte, de morir y la inteligencia artificial. Una mujer que había perdido a su hijo participó en este grupo. Decía que esa tecnología podía ser maravillosa y que le encantaría poder hablar de nuevo con su hijo, que se había suicidado. Pero pasadas tres horas de conversación y de escuchar las opiniones de todos decidió que no, que no querría hacerlo porque escuchar la voz de su hijo podría tener un efecto devastador en ella. La lección que aprendimos de todo esto es que hay que dar acceso a mayor conocimiento y más información para estar más concienciados. Hay que educar, concienciar sobre este tema, antes de que la gente pueda tomar una decisión

P. ¿Hay un riesgo de crear memorias artificiales? En el sentido de que los recuerdos de las personas son de cada uno. Hay un factor interpersonal en las relaciones. Por ejemplo, si queremos crear un bot de Papá, cada hermano puede haber percibido a su padre de manera diferente. ¿Puede generar conflictos dentro de la familia el tipo de bot que se pueda generar?

R. Creo que sí. Absolutamente. Y este conflicto puede tener diferentes niveles. Primero porque como dijiste tenemos una relación muy diferente con la gente. Yo soy una persona diferente para mi esposo, una persona diferente para ti y una persona diferente para mis colegas en Cambridge. Así que tal vez deberíamos tener una variedad de diferentes bots que estén relacionados con personas muy diferentes. También veo el potencial de conflictos entre los miembros de la familia. Puedo imaginar una situación en la que una hija, por ejemplo, quiere crear un avatar de un padre muerto y el hermano dice no. ¿Qué pasa en situaciones como esta? ¿Quién tiene el derecho a decidir si desarrollar esta tecnología? Por eso en uno de los libros que he estado trabajando con mi colega en Cambridge Tomasz Hollanek discutimos algo que llamamos el principio del consenso mutuo. Que el asunto de la donación de datos sea un tema que se decida en familia y que a todos los posibles usuarios de ese avatar se les invite a la mesa para saber si les gustaría participar en esta situación de inmortalidad digital, para que tomen una decisión consensuada entre todos para ver si quieren o no crear un avatar.

P. Pero cuando hablábamos de crear un bot, ¿no debería ser una decisión de la persona antes de fallecer? Es decir, dejaré a mis hijos mi legado, mis propiedades, dinero, y si yo quiero tendrás mi bot. Pero es mi decisión.

R. Absolutamente. Ese el primer paso que debemos dar: buscar el consentimiento explícito de los donadores de datos, la fuente de datos. Debería ser una decisión propia. Y si no quieres crear cosas como esta deberías tener el derecho de decir: no, por favor, no utilices mis datos personales para crear esto. Una colega mía sugería incluir algún tipo de cláusula o frase que dijera: no me resuciten, no me reanimen.

P. Entrando en los personajes públicos en los líderes sociales en la memoria y el legado de personas que sean trascendentes o cuya obra sea trascendente ¿En qué medida podemos crear bots que hagan perdurar ese legado? Incluso en la forma de ver el mundo o en la forma de su propia inteligencia. Cuando hablamos de inteligencia artificial, ¿podemos crear bots que imiten a esos grandes pensadores?

R. Voy a mostrar un video esta tarde durante mi presentación con Kim Kardashian, que recibió como regalo para su cumpleaños el avatar de su padre padre muerto. Resulta muy conmovedor ver este holograma diciéndole a Kim Kardashian que la quiere mucho y está muy orgullosa de ella y le desea lo mejor. Pero lo que realmente tenemos que tener en mente es que eso es solo una representación y puede ser muy equívoca. Por eso también tenemos que trabajar para elevar la conciencia sobre estas tecnologías y hacer que la gente sepa que esto es solo tecnología basada en computación y no son las cosas exactas. El movimiento hacia la profesionalización de este sector es un paso muy importante. Esta tecnología debería ser segura para quien la vaya a utilizar y normalmente lo que vemos es que no está respaldada por ningún tipo de investigación rigurosa y es más bien una cuestión de ensayo y error.


La celebración de una vida: Un homenaje a los difuntos en Alicante (Funerario Digital)

16 octubre. 2025

En el marco del Día de Todos los Santos, que se celebra el 1 de noviembre, el Grupo ASV Servicios Funerarios ha organizado un emotivo acto titulado «La celebración de una vida», que tendrá lugar el miércoles 22 de octubre en el Tanatorio la Siempreviva de Alicante. Este evento es un homenaje a los seres queridos que han fallecido en el último año y busca apoyar y consolar a las familias y amigos en su proceso de duelo.
Con acceso libre previa inscripción, esta ceremonia se ha convertido en un evento anual que congrega a más de un centenar de alicantinos. Los asistentes podrán participar en un homenaje colectivo mediante un ritual simbólico: colgar mensajes y pensamientos en el «Árbol del Recuerdo», uno de los momentos más emotivos de la ceremonia.

El acto estará marcado por momentos cargados de emoción, con poemas, textos y música que crearán un ambiente especial para el recuerdo y la reflexión. Sonia Carricondo, responsable de Comunicación y ESG en Grupo ASV, destaca la importancia de este evento como herramienta de apoyo en la superación del duelo.

Además, para aquellos que no puedan asistir en persona, la ceremonia será transmitida en directo a través de la web y el canal de Youtube de Grupo ASV Servicios Funerarios. También se ha habilitado un espacio en línea para enviar mensajes y honrar a los seres queridos desde cualquier parte del mundo.

Este evento no solo es un tributo a los que han partido, sino también un reflejo del compromiso del Grupo ASV con el bienestar emocional de las familias, ofreciendo un espacio para el recuerdo y el consuelo en un momento tan significativo.


Mémora vuelve a Funermostra con una firme apuesta por la innovación y el compromiso con el sector funerario (Revista Funeraria)

17 octubre, 2025

Imagen del equipo directivo de Mémora en Funermostra. De izquierda a derecha, Miguel Núñez, director Comercial de Fábrica de Arcas; Roger Costa, director de fábrica de Eurocoffin; Jordi Fernández, responsable de tanatopraxia de Mémora; Romina Pueyo, directora Comercial Estratégica de Mémora; Augusto Huesca, CEO de Mémora; Tiago Rodrigues, director Internacional de Mémora; Fernando Argüello, director de Negocio de Mémora; Manuel Pereira, director Comercial y de Producto de Mémora; Gloria Llobet, directora de Memoranet;Paulo Carreira, director General de Servilusa.
El grupo funerario Mémora regresa a la feria Funermostra como patrocinador oficial del principal punto de encuentro del sector funerario en España. El grupo funerario apuesta junto a Funermostra por promover este encuentro anual entre los profesionales y continuar avanzando hacia la excelencia, la sostenibilidad y la innovación del sector.
Del 14 al 16 de octubre, Feria Valencia ha acogido un stand de 200 metros cuadrados de Mémora, en el que los visitantes han podido conocer de cerca una muestra de productos y una exposición de siete modelos de féretros fabricados por Eurocoffin, la empresa del grupo especializada en la producción sostenible de arcas funerarias.

Además, como parte de su compromiso con la investigación y la innovación social, Mémora ha colaborado con la Universitat de València en la presentación de un proyecto que invita a repensar el final de vida. A través de unas gafas de realidad virtual, los asistentes han podido experimentar una iniciativa pionera que busca abrir nuevas perspectivas sobre la despedida y el acompañamiento en los procesos de duelo.

El equipo directivo, liderado por Augusto Huesca, consejero delegado, ha estado presente en Funermostra junto con Xavier Poch, director de Negocio Cataluña, Este y Centro; Fernando Argüello, director de Negocio de Norte, Canarias, Andalucía y Noroeste; y Romina Pueyo, directora de Estrategia Comercial. Asimismo, en el stand han estado presentes los profesionales que trabajan en las distintas áreas de servicio del grupo funerario, desde traslados internacionales, adquisiciones, fabricación de féretros o tanatopraxia.

Memoranet, un encuentro de la Red de Colaboradores de Mémora
En el marco de la feria, Mémora también ha celebrado un nuevo encuentro de su red de colaboradores Memoranet, un espacio de reflexión y diálogo sobre los retos y tendencias del sector funerario. El acto, liderado por Gloria Llobet, directora de Memoranet, y Jordi Fernández, responsable de tanatopraxia, ha permitido compartir experiencias y conocimientos entre profesionales que trabajan día a día para ofrecer un servicio más humano, innovador y cercano.


No hay muertos para tanto tanatorio en España, pero es un negocio muy rentable (El Confidencial)

Mientras aquí las salas para funerales superan seis veces la demanda, otros países europeos apenas tienen lo imprescindible. Las funerarias han creado una red amplia y fácil de mantener
Fachada del tanatorio de San Isidro. (Europa Press/Carlos Luján)
Por Alfredo Herrera Sánchez
Gráficos: Unidad de Datos
Christina Rebhahn-Roither (Der Standard. Austria)
Marina Kelava, (H-Alter.org. Croacia)
Hotnews (Rumanía)
Voxeurop (Francia)
17/10/2025 – 05:00

Alas 10:30 solo una vecina recorre con su perro el enorme parque frente al tanatorio de San Isidro en Madrid, pero el silencio sepulcral empieza 200 metros más abajo, en las faldas de la colina. Un señor que fumaba y una anciana miraban de soslayo desde un banco el enorme edificio revestido en vidrio. Quizás se han acostumbrado a su presencia o asumido que allí terminarán sus cuerpos.

Como las 21 salas del tanatorio de San Isidro, en España hay 7.000 para velar a las menos de 1.200 personas que fallecen como promedio cada día. La infraestructura supera seis veces la demanda y algo parecido ocurre con los crematorios. Los 537 que funcionan pueden realizar 1.549 incineraciones diarias, frente a una demanda actual de 570. En otros países europeos como Croacia, el panorama funerario es muy diferente, llegando este último a contar con un horno crematorio por cada 1,7 millones de habitantes. Ningún país europeo cuenta con una red funeraria tan numerosa como la española, que destaca además por las lujosas condiciones de sus servicios.

El recibidor de San Isidro parece el de un hotel cinco estrellas. Tiene el suelo de mármol, orquídeas exóticas, ascensores con vista panorámica, pantallas informativas de dos metros de alto y un mezzanine con vistas al vecindario. La escena la coronan enormes candelabros dorados, como las puertas de los ascensores, los picaportes y el resto de luces. Si no hay oro en este sitio al menos lo parece.

Los altavoces reproducen música y sonidos tenues, sombríos, para complementar un escenario donde la suntuosidad alivia el duelo. A fin de cuentas, debido a la vulnerabilidad de los agraviados, quizás la muerte de un ser querido sea uno de los contextos en los que menos pegas se ponen para pagar por algo. Eso explicaría que el ticket medio de un servicio funerario en España ronde los 3.700 euros y llegue a 5.000 en grandes ciudades como Madrid, según la OCU.

Mucho dinero con pocos muertos
La rentabilidad del sector compensa la extensión de su red asistencial, pero al tratarse de un servicio disponible las 24 horas en todo el país, no deja de ser raro que la cantidad de salas sea seis veces más grande de lo necesario. De las 21 salas de San Isidro, solo 13 estaban ocupadas en la mañana del martes 14 de octubre. “En este sitio trabajamos mucha gente y las cosas marchan bien porque los servicios funerarios dejan mucho dinero”, explica bajo anonimato el chófer de uno de los tres coches Mercedes-Benz aparcados en la entrada del edificio para trasladar a las familias de fallecidos asegurados.

“Hay lugares mucho más grandes, como el Tanatorio Sur con 42 salas”, continúa el conductor que lucía un Rolex en su muñeca izquierda. “Este casi siempre tiene alta ocupación porque es muy céntrico y tiene buena fama. A la gente le gusta despedir bien a sus difuntos y por eso pagan seguros de decesos que luego costean todo esto. La mayoría de pólizas incluyen el traslado de los familiares en nuestros coches y por eso movemos a personas de todas las clases”.

Todas estas empresas se nutren fundamentalmente de las aseguradoras escogidas por los 22,3 millones de españoles que han decidido garantizar sus sepelios. De ahí salen los más de 1.679 millones de euros que facturó el sector en 2023, de acuerdo a las últimas cifras publicadas por su patronal, PANASEF. Ese monto no llegaba a los 1.500 millones en 2017, pero ha crecido considerablemente y en 2023 llegó a igualar el pico de facturación de 2020 causado por el aumento de defunciones que trajo la pandemia. Alejandro Quinzán, secretario general de PANASEF, adelanta a este diario que el sector facturó 1.719 millones de euros el año pasado, siguiendo la estela de crecimiento.

“Los funerarios han hecho un esfuerzo muy grande para acercar sus servicios a la ciudadanía y hoy muchos pueblos cuentan con un tanatorio propio para evitar los grandes desplazamientos. Pasa lo mismo con los cementerios, pues hay 17.682 para 8.131 municipios, más de dos por cada localidad”, explica Quinzán. “Nuestra red de tanatorios nos permite tener más tiempo para prepararnos ante contingencias como la pandemia, ya que los cuerpos tienen que pasar por determinados procesos que pueden tardar. La cifra de salas se mantiene estable y muy pocas cierran. En otros países europeos hay menos porque las personas están muy acostumbradas a desplazarse cuando fallece un familiar”.

También influyó en la creación de tanatorios el tema cultural, pues tras abrirse en 1968 el primero en Barcelona, se ha vuelto cada vez más raro velar a los difuntos en sus casas. El establecimiento de la Ley Mortuoria en 1974 creó un marco normativo y el impulso definitivo llegó en los años 80, cuando se liberalizó el sector y comenzaron a abrirse tanatorios privados.

Nuria Capdevila, ingeniera en diseño industrial y fundadora de la única consultora para empresas funerarias en Europa, explica que muchas aseguradoras han verticalizado el negocio al adquirir a las empresas que prestaban los servicios al cliente final: “También ocurría con frecuencia que cuando una empresa grande compraba a una funeraria local, el dueño que vendía abría un negocio similar al lado y la red de tanatorios fue creciendo a un ritmo menor que el número de fallecidos. Otra cosa que ayuda a las empresas es que los inmuebles suelen ser propios y les cuesta mucho menos mantener los negocios operativos a pesar de tener pocos servicios en determinados momentos”.

La experta consultada vive en Tárrega, un pueblo cerca de Lérida con un tanatorio que entra en servicio solo cuando fallece algún vecino. El resto del tiempo permanece cerrado sin generar grandes costes, precisa Capdevila. “Es como si fuese un almacén o un hotel, lo abres solo cuando lo necesitas y por eso no son difíciles de mantener por las empresas. La mayoría no brindan servicios extras como la cafetería, la tanatopraxia o la floristería. Los llevan los propios gerentes y si se ven desbordados contratan de manera extraordinaria a alguna persona”.

Este diario se puso en contacto con una empresa funeraria familiar de la provincia de Ciudad Real que opera en dos pequeños municipios: Daimiel (casi 18.000 habitantes) y Fuente del Fresno (3.000 habitantes). En el primero, los hermanos Carreño, que administran la compañía fundada por su padre tres décadas atrás, tienen un tanatorio de tres salas, y otro de dos en el segundo. Pueden pasar semanas sin que nadie fallezca en el pueblo más pequeño, pero eso no representa un problema para el negocio.

“Nunca hemos pensado en cerrar alguna sala”, cuenta uno de los hermanos empresarios. “Si pasa un mes y no damos ningún servicio, puede que la semana siguiente hagamos tres y así nos recuperamos, aunque aquí cobramos alrededor de 2.000 euros por servicio, mucho menos que en las ciudades. Nuestro empleado está siempre ahí pendiente de que se le avise o si no se pone a cobrar recibos de nuestros vecinos asegurados. Siempre tendrá algo que hacer. No podemos echarlo o buscar a una persona a tiempo parcial. Con esta fórmula nos va bien. Mi padre creó el negocio para que la gente no tuviera que salir de estos pueblos a velar a sus muertos”.

España encabeza las cremaciones en Europa
Si bien en las estadísticas nacionales las inhumaciones todavía adelantan ligeramente a las cremaciones, en las grandes ciudades españolas cambia el destino escogido para los cuerpos sin vida. El último informe publicado por PANASEF señala que el 55,2% de los fallecidos en las capitales de provincia en 2023 fueron cremados. Interfunerarias, la compañía administradora del tanatorio madrileño visitado, y Mémora, otra de las líderes del sector, prefirieron no hacer declaraciones sobre estas prácticas a El Confidencial. Pero indudablemente no les va mal, aunque el mercado se haya transformado en la última década con el incremento exponencial de las cremaciones, como muestra el siguiente gráfico.

Esa inclinación de la población urbana española por reducir a cenizas los cadáveres forma parte de una tendencia que afecta a todo el continente. Los países del norte y centro-norte europeo, como Reino Unido, Suecia, Dinamarca o Alemania, tradicionalmente han contado con más crematorios y las tasas de cremación son más altas, debido a su mayor secularización y la falta de espacio en los cementerios. En el sur del continente las tradiciones católicas y ortodoxas han favorecido históricamente el entierro, pero eso está cambiando.

En Italia, por ejemplo, la cremación se ha disparado en los últimos 30 años, debido a una mezcla de cambios culturales, elevados costes y la creciente secularización de la sociedad. Si en 1995 solo se cremaban menos del 3% de las personas fallecidas, en 2023 esa cifra creció hasta el 38%, según datos de la asociación del sector funerario Utilitalia SEFIT, citados por Reuters.

De igual modo, en Francia, donde la cremación fue legalizada en 1887, se pasó de incinerar el 10% de los fallecidos en 1994, a un 40% en 2022, de acuerdo a información publicada por la Federación Nacional de Funerarias de Francia. Además, en 2023, el 50% de los franceses preferirían ser cremados, según una encuesta del Instituto Francés de Opinión Pública, frente al 20% que lo elegía en 1979.

En Austria, por su parte, hoy existen una veintena de crematorios y más de 500 empresas funerarias, según la Asociación Federal de Funerarios. Esa infraestructura ha permitido que aumente el porcentaje de cremaciones en los últimos años. Se estima que alrededor del 45% de los sepelios en todo el país son cremaciones, aunque hay grandes diferencias regionales. Las razones para optar por la cremación son muy diversas: la falta de espacio en los cementerios, la motivación ecológica o el deseo de ser enterrado en un bosque o en un cuerpo de agua.

En otros países como Suiza los dolientes van un paso más allá y defienden una alternativa ecológica al entierro y la cremación. Ciudades como Ginebra han apostado por la llamada “humusación”, un proceso mediante el que los cadáveres se transforman en compost. Para llevarlo a cabo, se coloca el cuerpo directamente en el suelo y se cubre con tierra, sin ataúd, sin ropa y sin otras pertenencias. Esta práctica se defiende en otros sitios como Bélgica.

También hay familias partidarias de soluciones funerarias más ecológicos como la resomación o cremación acuática, presente en Noruega o Escocia. Ese proceso se lleva a cabo al exponer el cadáver a una disolución alcalina que lo reduce de forma menos contaminante.

Croacia, dos crematorios para casi 4 millones de personas
Mientras en algunos países europeos se desarrollan nuevos métodos de cremación, en otros aún no se ha extendido como práctica debido a la carencia de una red asistencial adecuada o a la incompatibilidad cultural. En Rumanía, por ejemplo, confluyen ambos factores. Allí la cremación es legal, pero se ve como una práctica tabú, rechazada por la Iglesia Ortodoxa Rumana. Actualmente existen tres crematorios para humanos en Rumanía y su uso no es común, principalmente por las tradiciones religiosas que consideran la cremación un pecado. La población cristiana en Rumanía es muy elevada; según el censo de 2022, aproximadamente el 95% de los habitantes se identifican como cristianos, y la mayoría (73,86%) pertenece a la Iglesia Ortodoxa Rumana.

Croacia es otro de los países europeos donde las familias tienen serias dificultades para acceder a la cremación, ya que solo tiene dos crematorios en funcionamiento. Uno está en la capital, Zagreb, y el otro en el este, Osijek, la cuarta ciudad más grande del país. Hay dos crematorios más en fase de planificación en el sur de Croacia, en las ciudades de Šibenik y Split, pero no se sabe con certeza si finalmente se construirán.

Lo que resulta aún más curioso es que en septiembre de 2025 los dos crematorios existentes en Croacia presentaban averías, por lo que era muy difícil incinerar a alguien, especialmente si el fallecido no vivía en Zagreb. El crematorio de Osijek ha estado fuera de servicio desde la primavera debido a un mal funcionamiento de la chimenea. Se colocó una nueva chimenea el 7 de octubre y comenzó a prestar servicio después de casi medio año paralizado.

En el crematorio de Zagreb, uno de los dos hornos está averiado desde septiembre, por lo que no se pueden satisfacer todas las necesidades y solo aceptan solicitudes de cremación de residentes de Zagreb. Por ello, en septiembre, quienes querían incinerar a sus familiares fallecidos tuvieron que enviar los cuerpos a la vecina Eslovenia para su cremación, lo cual es más complicado y costoso. La reparación del horno dañado debería completarse en un mes y la capital planea comprar dos hornos nuevos.

Incluso con los dos crematorios croatas funcionando, si alguien de la ciudad más meridional, Dubrovnik, desea incinerar a un familiar fallecido, el cuerpo debe viajar 600 kilómetros hasta Zagreb u 880 kilómetros hasta Osijek (si pasa por otro país, como Bosnia y Herzegovina, el viaje a Osijek sería de 530 kilómetros).

La ciudad costera de Rijeka cuenta con espacio para crematorios dentro de sus cementerios, pero nunca se adquirió el equipo necesario para la cremación. Como informaron los medios en 2024, el director de la funeraria de la ciudad afirmó que el equipo es caro y no hay suficiente interés por la cremación como para justificar los costos. Sin embargo, en ese desinterés de los clientes influye el hecho de que tengan que pagar el transporte de Rijeka a Zagreb u Osijek, y viceversa.

Los funerarios croatas afirman que los crematorios privados podrían ser útiles, pero hasta el momento no ha habido ninguna iniciativa del sector privado para gestionar un crematorio. Mientras tanto, los cementerios y las tumbas tradicionales son caros y, en algunas ciudades, casi imposibles de adquirir debido a la limitación del espacio.